13 enero 2011

Osaka

Cómo amante de la comida japonesa/peruana siempre he tratado de ir a todos los restaurantes especializados en este rubro gastronómico y debo decir que el que me ha cautivado es Osaka.
Su ubicación es muy buena, en plena Av. Conquistadores en San Isidro, vecino de La Bistecca y del restaurante Bravo, parece un rinconcito escondido porque su fachada no es muy llamativa, cómo todo estilo japonés.

La primera preocupación es donde estacionar el auto, ellos tienen valet parking y estacionamientos frente al local, sin embargo dado que la zona es tan comercial es más fácil entregarles el auto a ellos para que vean donde lo estacionan. Igual si vas de noche puedes cuadrarte frente a las decenas de tiendas que hay por ahí.

Una vez adentro te reciben con el clásico saludo en japones que nunca sé que significa, aunque asumo es "Bienvenido". Te recibe la anfitriona muy amable y te ubican en la mesa. Debo decir que este restaurante es pequeño cómo local y dada su fama es muy concurrido y generalmente siempre está lleno.
Bueno, yo cómo muchos no acostumbramos hacer reservas porque somos de en el momento del antojo salir a comer y no lo planificamos, así que muchas veces hemos tenido que esperar por una mesa (No hay sala de espera, tienes que esperar en el auto o fuera)

La carta no es muy variada sin embargo está súper bien explicada. Soy asidua a este restaurante así que no dudo a la hora de pedir, nada tiene pierde.
La atención es buena, amable, cortés, sin embargo no te guian mucho en la elección.
Esta vez pedí un tiradito de maracuyá que se llama Carpassion, es simplemente espectacular, increíble, un pedacito de nirvana, que les puedo decir, no encuentro los adjetivos, es una delicia de principio a fin. El pescado blanco súper fresco en láminas delgaditas y encima una salsa de maracuyá en su punto coronado todo esto con una especie de coco frito si no me equivoco. Es un must!

Pedimos ademas varios rolls, uno de mango con salsa de maracuyá que se llama Tropical Roll, luego el Roll Parma que son rolls con conchitas bañadas en un queso parmesano derretido y crocantito, un placer.



Para terminar pedimos unas cucharitas de causa (masa de papa) variadas: Una de pulpo picante, otras de langostino y otras en causa de huacatay (masa verde), todo un acierto!
Estas causitas son cucharas de esas de la sopa wantan, cada par de cucharitas cuesta 9 soles y créanme que quedarán satisfechos.







Para acompañar todo pedimos una copa de vino blanco de la casa, un chardonnay que es una delicia heladito.

La cuenta salió más o menos 130 soles.
En este restaurant la estrella es la comida, no puedo resaltar la atención porque es normal, el local es muy agradable sin llegar a ser elegante.

Osaka, un restaurante al que iré siempre si no cambia la calidad de la increíble comida!  Para mí, el mejor hasta ahora, en comida japonesa/peruana.


Restaurante: Osaka (Fusión japonesa/peruana)
Dirección: Av. Conquistadores 999, San Isidro, Lima, Peru
Teléfono: 222-0405


Calificación:
Ambiente: 4 tenedores
Atención: 3 tenedores
Comida: 5 tenedores
Estacionamiento: En el frontis del local y valet parking
Relación comida/precio: Aprobado
Ubicación: Zona segura y de mediano acceso en día de la semana.

27 marzo 2010

Restaurante Fiesta

Si hay un restaurante en Lima del cual muchos deberían aprender es del Restaurante Fiesta.
En todos los sentidos. En atención, en la comida, en la presentación y en ambiente.
De por sí el concepto es de un restaurante regional, con comida típica de una ciudad, Chiclayo.
Si bien la imagen de la mayoría de restaurantes regionales en Lima no son elegantes y más parecen una reproducción de una "picantería", este restaurante si se tomó el tiempo y la inversión en darte el caché que se merecía este tipo de comida.
Lindo lugar, súper limpio, manteles de tela, cubiertos impecables, meseros bien vestidos y educados, amables al extremo, te hacen sentir como si fueras un rey y no pasa ni un segundo en que los llamas para que te complazcan en lo que necesites, y no exagero.
Los precios son un poco elevados, no extremadamente, al rango de cualquier restaurant de alta cocina. Y me parece bien, pues lo vale.








Llegamos tipo 2 pm, y cómo siempre el lugar estaba casi lleno. Tiene estacionamiento en el frontis del restaurante y ya estaba copado, tuvimos que cuadrarnos en la calle del costado.
Desde que llegas a la puerta te reciben con una sonrisa, desde los porteros hasta el mesero adentro que te dirige a tu mesa.
Uno no se da cuenta de lo importante que es este detalle hasta que en otro restaurante te tratan como si te estuvieran haciendo un favor al atenderte.
La amabilidad y el cariño de un mozo no tiene precio, tanto que te hacen sentir cómo en casa. Probablemente esto sea un reflejo de la amabilidad de la gente del norte del país.
Sigo, nos sentamos y enseguida llegó el mesero ofreciendonos algo de tomar.
Pedimos un Pisco sour de maracuyá frozen. Ya sabíamos que lo hacían ahí por eso lo pedimos. Definitivamente delicioso, como siempre. En su punto exacto de alcohol y de dulce, con el hielo casi imperceptible, un batido perfecto.








No miento si digo que llegó exactamente en 5 minutos, riquísimo. Lo tomamos al vuelo, tan rápido que tuve que pedir otro, imperdible!

Al ratito llegaron las cortesías de la casa, un pedacito de ceviche de mero picantito en una cama de galletitas caseras de choclo, una cosa espectacular para ser algo tan simple.









Hasta ahí me parecía que estaba en otra ciudad, no era Lima, todos eran demasiado cariñosos y atentos. Era como llegar a la casa de la tía que más te quiere y que te atiende cómo su engreido.

Pedimos de entrada una Papa a la Huancaina para compartirla entre los dos. Debo decir que somos de comer poco, no nos gustan los patos repletos, así que compartimos.
En El Fiesta las porciones son generososas, cómo en provincia. Así que había que hacer espacio para el segundo plato.
Llegó la entrada que estaba deliciosa!!! Picantita como nos gusta, cremosa, con trocitos de queso fresco encima, las papas eran tipo puré sazonado con aji, hechas bolitas y encima la salsa huancaína más rica del mundo.

La devoramos en un 2x3!







Llegó la hora del segundo plato. Yo pedí una Arroz con Pato a la Chiclayana y mi esposo pidió un Ají de Gallina.
Llegaron más o menos en 20 minutos.
Mi Arroz con Pato estuvo riquísimo, delicioso, con el saborcito del norte pero estilizado, delicado, y para nada seco. Es decir perfecto.
El Ají de Gallina según mi esposo estuvo riquísimo también. Debo confesar que solo probé un poquito porque no podía separarme de mi plato.













Han incorpordado el pancito que te ponen en cualquier restaurante A1, este pan es casero y la mantequilla también, de pura leche, totalmente casera.

Finalmente pedimos la cuenta y salió 180 soles. El costo promedio por plato es de 40 Soles y cada Pisco sour 25 soles.

Sinceramente no puedo objetar nada de este restaurante. Lo resaltante aparte del sabor de la comida, la buena presentación, el buen ambiente, etc es la alegría que demuestran los mozos, los porteros, todos. Te reciben con cariño y sonrientes en todo momento.
Se preocupan mucho porque te vayas contento y cuando te despides en la puerta te muestran una copa gigante con todo tipo de chocolates y caramelitos para que te vayas con un dulce sabor en la boca.

Felicitaciones a ellos, si alguien de ahí lee esto, ojalá nunca cambien. Es algo que los clientes valoramos mucho, la atención y el cariño, aparte de la sazón deliciosa del cheff....ESPECTACULAR este restaurante!


Restaurante Fiesta Gourmet
Dirección: Av. Reducto 1278 - Miraflores


Calificación:
  • Ambiente: 4 tenedores
  • Atención: 5 tenedores
  • Comida: 5 tenedores
  • Estacionamiento: En el frontis del local
  • Relación comida/precio: Aprobado
  • Ubicación: Zona segura y de fácil acceso

20 marzo 2010

Amor Amar

Para inaugurar nuestro blog acerca de los restaurantes que vamos visitando, hemos escogido a uno que ha abierto sus puertas hace 2 semanas.




Se trata de "Amor Amar", lindo nombre y se nota que los dueños han invertido bastante en la infraestructura del local.








La idea de la casona barranquina remodelada, con varios ambientes, una terraza con una barra muy bonita, techos de madera y buen ambiente. En el interior del restaurante se ha habilitado una galería de arte muy original. Aunque nunca supimos de quien eran los cuadros porque no tenían una leyenda abajo del cuadro con el nombre del artista.





Otra idea original, en la parte trasera de la terraza tenían un orquideario. Una especie de exposición de orquideas hermosas que puedes comprar, los precios oscilan entre 120 y 200 soles.




Pero vamos a lo importante. La comida.




Al llegar nos sentamos en la terraza y enseguida llegó la mesera muy amable y sonriente a ofrecernos sugerencias de la carta.




Cómo estaban hasta el día de hoy, según nos explicaron en "marcha blanca" (significa que están probando la carta y escogiendo los platos favoritos de la gente, algunos los dejarán en carta y otros pasarán al olvido) nos dijo que podíamos escoger una entrada, segundo y postre de la carta todo por 60 soles. Nos pareció excelente y comenzamos.




Le pedimos un par de pisco sours de maracuyá frozen, que trajeron inmediatamente y estuvo espectacular.








Miramos la carta y los platos eran bastante fuera de lo común, muy originales, muy!


Mientras le pedimos a la mesera que nos recomendara cuales podíamos pedir.


Ella muy efusiva nos recomendó un Tiradito al pesto con alcachofas y portobellos.





Cómo yo no quería repetir lo que mi esposo pidió pedí un Pulpo a la parrilla con papas ali olí.




Llegaron las entradas y el tiradito me pareció que no estaba tan espectacular como la chica nos había dicho. Lo encontramos un poco pesado, la combinación de ingredientes muy pesada...Pero cómo el pescado se sentía tan fresco en láminas lo terminamos, sin mucho entusiasmo.



El pulpo a la parrilla estuvo bueno. Así simple, bueno nada más.



Llegó la mesera y nos preguntó que tal nos pareció. Nosotros siempre tan sinceros: Más o menos...


Automaticamente le cambió la cara y ya no estuvo tan sonriente y nosotros arrepintiendonos de ser tan sinceros. Aunque claro, estamos pagando y merecemos lo mejor, no?


Otra vez le pedimos que nos recomiendo el segundo plato y a mi esposo le ofreció un "Calamar relleno de colita de buey" diciendo que este era el que más pedían los clientes y que ella lo había probado.



Yo ya a estas alturas no quería probar cosas tan exóticas y me pedí, gracias a Dios lo tenían, un Arroz con mariscos.


Llegaron los platos y fue una absoluta decepción. Lamento decirlo.


El arroz con mariscos fue una cosa tan simple, el sabor es mejor en cualquier cevichería, lo juro. Aparte casi pierdo un diente con un pedazo de caparazón de concha que estaba en el arroz
(Porque las conchas enteras brillaron por su ausencia), luego encontré otro, y otro, y los separé al borde del plato para decirle a la mesera...







El plato de mi esposo sinceramente era un espanto. La combinación del calamar con el relleno de cola de buey un total desacierto. La presentación de los platos deja mucho que desear cómo verán en las fotos.




Le comentamos a la mesera que el plato con calamares estaba espantoso y dijo que lo retiraría y podía pedir otro. Mi esposo pidió un Langostinos Jumbo a la ocopa con tacu tacu con tinta de calamar. Lo trajeron y yo ya no quería probar más. Perdí el interes.


Mi esposo dice que el tacu tacu estaba muuuuy rico pero que los langostinos si bien eran gigantes estaban "gelatinosos", es decir, no se cocinaron bien. (Disculpen la foto, ya había empezado a comer)





Cuando vino a preguntarnos la mesera ya no pudimos decirle más y dijimos : "Si, está bien. Gracias"


Al rato vino el dueño y nos dijo que mil disculpas por el problema con los trozos de caparazón de conchas en el arroz (el cual dejé a la mitad) y que cómo estaban en la bendita "marcha blanca" todo lo estaban probando y habían errores. Eso fue todo y se fue.


Llegó la hora de los postres y ya sin mucho entusiasmo pedimos lo que nos parecío que no tenía pierde. Una Tarta de manzana con helado y Un Tres leches de Piña Colada.


Los postres debo decir estaban muy ricos, el Tres leches de Piña Colada espectacular y las salsitas deliciosas!



Pedimos la cuenta y el resultado fue 180 soles, aparte la propina de 18 soles.



En resumen, es un lindísimo lugar, muy agradable para ir a tomar unos tragos y comer postres.


La comida a mi parecer deja mucho, muchísimo que desear. Recomiendo que mejoren la carta y la presentación de sus platos, la preparación y sobre todo me parece que cuando se cometen errores con la preparación y se nota el descontento del cliente, al acercarse el dueño debe ofrecer soluciones y no solo disculpas, por ejemplo reducir la cuenta cómo para resarcir el mal momento.




Restaurante Amor Amar
Dirección: Calle García y García 175 - Barranco (Alt cuadra 7 de Bolognesi)




Calificación:

  • Ambiente: 5 tenedores
  • Atención: 3 tenedores
  • Comida: 1 tenedor
  • Estacionamiento: En la calle
  • Relación comida/precio: Desaprobado
  • Ubicación: Zona no muy agradable
 
Gorgeous Beaches of Goa